Sunday 21 April 2013


es inminente el cambio de clima y de humor
mañana va a llover, y va a lavar lo malo
es la noche ideal para dejarlo afuera, en remojo
y colgarlo mañana a las tostadas
y reír, reír de todo
porque el sol salió de nuevo 

Antes no pasaba

“Hola, ¿Tío? Cómo andás Tío, estoy en un tren, en Capital. ¿Vos bien? Bien, Tío, te escucho más o menos, recién salgo. Bueno, bueno, me alegro, sí. Mañana vuelvo a Navarro. Che, escuchame una cosa, Tío, ¿viste mi casa, en Navarro? Todos bien, Tío, sí gracias a Dios. ¿Allá? Bueno, qué lindo che, qué bueno. Sí, escuchá, ¿viste mi casa? Lo que pasó, un mal trago, Tío, estuvo faltando plata en mi casa, y el dvd, ya van dos o tres veces. Hablé con Carlos ayer, está bien Carlitos, me dijo que ayer quisieron entrar otra vez, que justo Paula se estaba bañando y escuchó el ruido en la ventana y del susto y la angustia se quedó paralizada, pero llegó a cerrar la ventanita y los pendejos al final salieron cagando. Sí, rajaron cagando. Sí, ya sabemos quiénes son, los pendejos de mierda. Pobre Paulita, además. Che, te quería decir, llamó a la policía como a la hora pero llegaron y al pedo, viste, el tramiterío. Y Paula una angustia, sola estaba. Yo estoy llegando mañana y parece que el comisario se enteró y quiere hablar conmigo, viste. Ya sabemos cómo es, Tío. Y claro, ya estamos cansados, ni podés bañarte tranquilo. No llegan ni a los quince años, borregos de mierda. Claro, son ellos, los hijos de Aldo. Y es así, al final esta gente es así. Nada importante, che, nos faltó una plata dos o tres veces. Pero bueno, te quería decir, los pendejos estos son los de atrás de tu casa viste. Los de Aldo, claro, habían ayudado a tu mujer con el traslado de los escombros, viste, ¿te acordás? La ingratitud de esta gente, Tío, no tiene goyete. Esos. Se me ocurrió, estamos cansados, che, pendejos de mierda, el tema del tinglado, el tuyo, ¿seguís con eso? Sí, bueno. ¿No me harías esto? Sería así. Claro, borracho de mierda, Aldo, en su perra vida terminó un trabajo, todo a medias, Tío, ya sabemos. Jajaja, ni que le digas, Tío, un desastre, ya sabemos. Con Irene estamos resueltos, viste, se acabó la caridad, viejo. El piso de la galería se nos inunda cada vez que llueve un rato; un desastre como trabaja. En el cumpleañós de Celina no bajaron la música ni diez minutos, toda la santa tarde escuchando su música de mierda. Jajaja, y bueno, Tío, son así. Totalmente, mirá si iba a pasar esto cuando vivía Papá, los Tielles de vecinos, una tranquilidad... vivíamos en su casa o ellos en la nuestra, si vos te debés acordar mejor. Pero yo no cedo más, viste. Los saludas, sos educado y te devuelven con un afano, negros de mierda. Claro, Tío, para vivir con el culo en la mano, con el miedo de que tus propios vecinos. Mirá, por eso, a mí se me agotó la paciencia. Quiero irme a trabajar tranquilo, sin tener que pensar que Paula... Y claro, sabés las ganas que tengo de que se rajen. Pero no se van a ir, che, nunca más, los tres hermanos, ya sabemos... y sus minas y sus hijos y los hijos de sus hijos, las tías, la abuela y la puta que los pario. Jajaja, claro, Tío, es un hormiguero. Bueno, claro, por eso, por eso mismo, sabés el susto que se pegó Paulita, escuchame, no se puede. Che, por eso, es así: había pensado, mañana los tres pendejos van a trabajar en tu casa, me dijo Celina, viste. Van a hacer un poco los jardines y van a estar a la tarde. Ni que lo digas, yo no sé por qué los llama. Seguro van borrachos, si son así todo el día. Y bueno, Tío, y bueno, de tal palo... Mirá si cuando en la época de Papá iba a pasar algo así, era una pintura el barrio, los vecinos. Decile a tu mujer que los mande a la manga, qué se yo, a limpiar la manga, a la tarde, a las cuatro, por ejemplo, y después que limpien todo el tinglado. Yo ya hablé con Cespedes, que los mande a limpiar el martillo hidráulico, que ajusten o limpien cualquier cosa, no importa, un rato dándole vueltas al martillo. Y Cespedes se va a ocupar, ¿sí?, bueno, bueno, bueno, Tío. Así terminamos viste, porque a la primera de cambio caen con un arma y se pudre todo, entendés. Imaginate. ¿Podremos hacer así? No sabes, no sabés Tío cuánto te lo voy a agradecer. Ya sé que vos sabés. Y Cespedes va a estar, claro. Bueno después hablamos más tranquilos pero vos me dejás tranquilo entonces que ya no joden más, viste, con que agarre a uno. Mañana con el comisario hablo yo, él me llama, si está al tanto. Después la mando a Celina, a que pida de buen modo el dvd, viste, a su casa, que entiendan un poco. Y bueno, viste, es durísimo, está muy, muy duro. Yo quiero vivir tranquilo Tío, claro. Me alegro que estés bien. Allá está bellísimo, pasas por el tinglado y pasás por casa Tío, claro, cuando quieras. Bueno, ¿no habrá problema?, bueno, bueno. Tenemos que vernos, Tío, juntémonos, no nos durmamos otra vez.. Dale. Bueno vos me chiflás cualquier cosa mañana, eh. Te mando un abrazo y tenemos que vernos.”