(Ahmed Ben Bella fue traicionado y apresado por su círculo
de allegados.
Lo sorprendieron los rifles apuntando a su cara, de madrugada,
cuando descansaba en su habitación de la residencia presidencial.
Su amigo Abdelaziz Buteflika participó del golpe de estado que
puso a Bumedián al poder en Argelia la primavera de 1965)
-¿dónde estoy, Ben Bella?- me pregunto y no consigo dormir
-...
-sé pocas cosas: que no fui timado ni mi nombre será un oprobio
-...
-es helado allí arriba.
-...
-y el palacio es ahora del infame
-...
- incluso él, Bumedian el hirsuto,
en su mente imaginaria de venias y municiones,
él como yo quiso nuestra libertad
ante todo y todos, yo en su camino
-...
-mas ¿cuál es aquélla ante todos?
-...
-pero tú, Buteflika, mañana hubiésemos ido al fútbol
-...
-por eso para ti, Abdelaziz, elijo tu carne destrozada en vida
y el goteo sordo de traición golpeándote la mollera,
hasta que nos salga el sol, querido hermano